La tecnología de vanguardia ampliará radicalmente la vida útil de los nodos IoT
La transición verde está en pleno auge en muchos sectores que cuentan con la tecnología para construir un futuro sostenible. Las normativas todavía difieren entre países y algunos están más avanzados que otros; en Dinamarca, casi la mitad de la electricidad proviene de fuentes de energía renovable.
A pesar de la falta de estándares globales, las iniciativas que tienen la energía verde como máxima prioridad están floreciendo en todo el mundo. Estas buscan lograr un equilibrio entre la creciente demanda energética a nivel global y la emergencia climática.
A nivel europeo, durante la conferencia sobre el cambio climático de la ONU COP25 en Madrid, la Comisión Europea subrayó su ambición de desempeñar un papel de liderazgo en la transformación de la economía global hacia la neutralidad de carbono. El Pacto Verde Europeo, presentado durante la cumbre, marca la hoja de ruta para que Europa se convierta en el primer continente climáticamente neutro para 2050, frenando el calentamiento global y mitigando sus efectos.
Dando forma a las futuras fuentes de energía para el IoT
The IoT sector is also exploring green options for interconnected devices and systems that collect and transfer data over a network. These devices are usually powered by batteries whose life cycle is currently one of the areas demanding energy-saving solutions.
HARVESTORE is a European project funded by the EU Program for Research and Innovation which has put together research, technology centres, and advanced industries from 6 different countries (Austria, Belgium, Denmark, France, Spain, and United Kingdom). The consortium members are developing a new technology paradigm to collect and store energy in a simplified single-stage procedure.
The 5-year project is now in its first year where Worldsensing is providing its know-how as IoT expert to help define the requirements that will make the solution viable to be adopted in an industry-standard IoT monitoring system.
Abriendo el camino hacia dispositivos IoT autoalimentados
El sistema de monitoreo inalámbrico de bajo consumo de Worldsensing se está utilizando para probar y monitorear los parámetros necesarios en la fase de diseño y mejorar la gestión energética en recolectores y unidades de almacenamiento.
Actualmente, Loadsensing garantiza 10 años de funcionamiento sin intervención. Con las mejoras energéticas desarrolladas en el proyecto, este ciclo de vida de la batería se extenderá de forma ilimitada gracias a la incorporación de un recolector de energía en el nodo.
Esta nueva generación de dispositivos ofrecerá posibilidades sin precedentes para la industria, entre ellas, el monitoreo de infraestructuras.
“El cambio climático está poniendo en riesgo infraestructuras envejecidas. Las inundaciones repentinas o los deslizamientos de tierra, por ejemplo, pueden comprometer la estabilidad de edificios o puentes. Cuando se producen estos fenómenos meteorológicos extremos, es necesario monitorear las infraestructuras críticas con una alta frecuencia de muestreo durante un período determinado. Actualmente, esto reduce significativamente la vida útil de las baterías de los dispositivos. Con la tecnología que estamos desarrollando, esto será cosa del pasado: los dispositivos podrán almacenar energía y recargarse de forma autónoma. Esto significa que estamos hablando de dispositivos con capacidades energéticas prácticamente ilimitadas”, explica Ignasi Garcia-Milà, Innovation Project Manager en Worldsensing.
Este proyecto ha recibido financiación del programa de investigación e innovación Horizon 2020 de la Unión Europea en virtud del acuerdo de subvención nº 824072